¿Debes parar de entrenar si tienes dolor de huesos?
¿De qué vamos a hablar en este post?
¿Debes parar de entrenar si tienes dolor de huesos?
A muchas personas una cosa que les frena a continuar el entrenamiento son los dolores. ¿A ti también te pasa? ¿Dejas de entrenar si empiezas a sentir molestia en la rodilla, el lumbar o en cualquier otro hueso?
Algunos motivos que pueden provocar esta molestia pueden ser la falta de movimiento de una articulación, el exceso de un movimiento mal realizado, la degeneración que la edad provoca en los cartílagos de las articulaciones, artritis, artrosis o antiguas lesiones. Y todo esto puede interpretarse como una señal para parar.
Sin embargo, muchas de esas patologías necesitan, precisamente, entrenamiento y deporte para frenar el dolor y tener una mejor calidad de vida.
“Si sufres dolor de huesos, no debes dejar de hacer ejercicio. Solo debes adaptarlo a tu nueva situación”.
El entrenamiento y el dolor de huesos
Se trata de una molestia difícil de superar y, a priori, es natural pensar que lo mejor es no entrenar. De hecho, no siempre se tiene toda la información sobre cómo funcionan los huesos y esto puede hacer que el desconocimiento cause problemas.
Pero la realidad es bien distinta. Los huesos son tejidos vivos, igual que pasa con los músculos o los ligamentos. Son tejidos que responden bien al ejercicio y que necesitan fortalecerse.
Realizar con lógica y un buen asesor una serie de ejercicios adaptados a la patología concreta que sufras va a servirte de mucha ayuda. Estos son algunos beneficios:
- Fortalecerás los huesos.
- Frenarás el deterioro del tejido óseo en la medida de lo posible.
- Mejorarás la flexibilidad de las articulaciones.
Por otro lado, como siempre, el deporte va a ayudar a mejorar tu autoestima y la calidad de los movimientos, además de tus capacidades. Es decir, te va a proporcionar las herramientas y el “poder” necesario para enfrentarte día a día a esos dolores, superarlos y te motivará a realizar todo tipo de actividades.
Cómo evitar riesgos y lesiones
Da el primer paso y mejora tu calidad de vida.
Los 8 ejercicios que recomendamos para ejercitar las articulaciones
Ten en cuenta que la realización de un ejercicio en una pierna ya potencia (aunque en menor medida) la fuerza de la otra, debido a la mejora del sistema nervioso. A continuación, te explicamos cómo realizar correctamente los ejercicios que te proponemos:
El ejercicio físico mejora el dolor
En definitiva, si sufres esta molestia no debes dejar de hacer ejercicio. Solo debes adaptarlo a tu nueva situación. Y recuerda que dejar de hacer ejercicio provoca que dejes de llevar nutrientes a este hueso o cartílago y que, por lo tanto, no te recuperes.
Con esta selección de ejercicios irás ganando fuerza en las articulaciones y mejorarás tu situación. No vas a conseguir que el dolor desaparezca de un día para otro, pero pronto empezarás a notar mejoras.